«El manejo de la doble realidad, de la invisibilidad y de la suplantación».

http://www.teledocumentales.com/revolucion-cuantica/

http://www.siliconweek.es/noticias/el-ordenador-cuantico-de-google-y-la-nasa-37000

.

Teoría de la doble realidad cuántica.

Si la teoría del entrelazamiento de dos partículas en la mecánica cuántica, supone que ambas tienen una memoria con los mismos movimientos, y que medir una inherentemente lleva a medir la otra, supone que Einstein estaba equivocado y que efectivamente se puede establecer que hay un universo paralelo, y que tan solo midiendo, visualizando o cargando uno, puedes adentrarte en el otro.
Más atrevida es aún la idea pero tiene sentido de que si en uno de los planos distantes entre sí de realidad, pero similares, se pueda alterar, o manejar de forma diferente, podríamos alterar, tan sólo uno de los planos, ¿o como si fuera un efecto espejo alteraríamos ambos de forma exclusivamente de pantalla.
Dicho de otro modo, que el sujeto A reflejado en el espejo, coma delante del espejo, no significa que el sujeto B al otro lado del espejo esté comiendo aunque imite al 100% cada uno de sus movimientos o realidades virtuales. Sin embargo alterar la imagen pantalla distante del sujeto B, debiera producir una reacción de alteración en el sujeto A de forma inevitable, o lo que es más sofisticado, una puerta de entrada alternativa que permitiría cambios en el sujeto A, desde el B.
O sea que existe la posibilidad cuántica de que el plano del espejo, pueda influir en el plano real desde la cuántica de la intimidad de la materia.
Demostración que se hace real con la prueba de «la doble rendija de neutrones».
En esta prueba la bifurcación, es decir la bipartición del camino que nos hace seguirla como en una ruta, nos puede distanciar o integrar sin que por ello nos salgamos del doble camino, pues ambos son parte de una misma realidad, pero ese doble plano ajusta la realidad física de una quinta dimensión.
La incógnita es, si alterando la realidad A desde B, se puede volver a dejar como antes de alterarla, o si queda permanentemente alterada y no haya explicación alguna en el plano A para adaptar o corregir estas variaciones.
Pongamos un ejemplo. Si en el plano A van dos persona caminando en paralelo, y en el plano B, recordemos dentro del espejo, esta imagen se bifurca y se trabaja, para que se separen, ¿podría corregirse el que aunque hayamos separado el camino de estas personas caminando, volver a situarlas a nuestro capricho que aparecieran o desaparecieran juntas?.
Esta posibilidad daría lugar a la invisibilidad, sin por ello no dejar de estar en ambos planos la realidad, aunque no sea visible.
Pongamos otro ejemplo. Que dos imanes estén juntos por polaridad cambiada que los une, al separarlos, aunque deba ser aplicando fuerza, no impide que en medio de ambos imanes podamos colocar otra realidad visible o invisible, puede ser un pedazo de papel, un dedo, un soplido y hasta un haz de luz. Sin alterar pro ello su constancia en atraerse. El efecto sería a la inversa pero equivalente en la repelencia con carga del mismo signo en ambos.
Pues bien, la realidad electromagnética y en otro plano aún más íntimo aunque relacionado, la realidad subatómica, y más lejos aún la realidad energética en planos alejados de la galaxia, y contrariamente al pensamiento de Einstein, sí se puede, manipular la imagen o realidad A, desde B, por lejos que estuviera.
Para ello evidentemente es donde entraría en juego la mecánica cuántica que precisa millones de cálculos infinitesimales que sucedan de forma instantánea de al menos una millonésima de segundo, que permita superar la velocidad de la luz que es el único enemigo de la manipulación física de la energía cuántica.
Se puede establecer, que cuanto más supere en veces multiplicadas, la velocidad del los cálculos cuánticos, la velocidad de la luz, más veces se podrá operar y reoperar sobre sí misma la materia, y la realidad en el plano A desde el plano B.